av Aura Sibila Benjamín
280,-
Lo que me enseñó la noche es un viaje íntimo por las memorias de una rica vida en el surreal Caribe, en el que surgen las voces de la infancia que se cruzan con el recuerdo de los seres amados. Llueve suave y de la nostalgia surge el Viendolejos, Mimi, Dolores la Lololo, Nengue. Miembros de un linaje maravilloso que en varios tiempos ocupan esa casa entre platanales, habitados por libélulas, pájaros, grillos y curucusíes, en la que el viento se cuela suavemente por las ventanas. Pero la lluvia en el trópico es impredecible, de súbito se hace tormenta y "cae tan fuerte, que erosiona las manos e inunda los ojos". Se han ido los momentos felices. "A dónde fueron los días", dónde quedó la voz de trueno del padre joven, los libros y los parques de la infancia, los parientes que se van por "la curva de los miedos", el arte destruido por fanáticos religiosos, la ciudad que arde tras el bombardeo, el amor que ha dejado un hueco en el pecho... "Enséñame, papá / enséñame a hacer un barquito de papel". La lluvia se detiene y "toca abrazar el silencio, asir el canto de los pájaros y afinar el tacto para sentir su pequeño latir en nuestro pensamiento". Es el momento de hacer y celebrar la música, de hacer y celebrar la poesía. Es el momento del amor. De ponerle toda la atención a la abuela que oportuna surge de la memoria, pone un viejo bolero en el tocadiscos de la casa y murmura algo acerca del amor. Del amor, pieza central de este libro cargado de magia y nostalgia de Aura Sibila Benjamín, extraordinaria poeta nacida en el trópico, muy cerca de ese mar Caribe que se abraza al istmo de Panamá.