Habilidades blandas para emprender un negocio exitoso

Para el desarrollo de un negocio exitoso se necesitan diversas habilidades. Además de las habilidades propias y específicas del rubro de cada negocio, podemos considerar que existe una serie de habilidades personales que contribuyen a un mejor desempeño profesional y laboral. No estamos hablando de las habilidades denominadas duras, que refieren a aprendizajes académicos, técnicos o específicos del campo profesional, como por ejemplo: saber de inteligencia artificial, programación, informática, diseño gráfico, redacción o idiomas.
Nos estamos refiriendo a capacidades personales que también se relacionan con los vínculos sociales. A este conjunto de habilidades las denominamos habilidades blandas. Estas habilidades incluyen aspectos de la personalidad como tener automotivación, escucha activa, empatía, realizar una buena gestión del tiempo o tener capacidades a la hora de comunicarse con los demás, entre otras habilidades. Las habilidades blandas y las habilidades duras se complementan. Más allá de ser un experto en el tema específico del que trata un negocio o saber sobre técnicas de venta, de marketing o de atención al cliente, son fundamentales las habilidades blandas, ya que a través de ellas se podrán establecer metas y objetivos, cumplirlos y lograr así un desarrollo efectivo del negocio o emprendimiento. Estas habilidades no sólo son útiles a la hora de construir y sostener a lo largo del tiempo un emprendimiento exitoso, sino también son habilidades que sirven para la vida, para relacionarse con los demás y con uno mismo de la mejor manera posible.