La Familia del Tejedor de Milagros

El Padre Gabriel Infante, un sacerdote católico conocido por muchos en la Ciudad de San Antonio, Texas, como el Tejedor de Milagros, decidió dejar el sacerdocio al enterarse de que había milagrosamente procreado una bebé impregnando a su amada Theresa Reynolds cuando ella aún era una virgen consagrada como hermana religiosa. Lejos de Gabriel, la virgen embarazada ya se había salido de la vida religiosa para tener a su bebé por su cuenta, pensando que el místico tejano nunca dejaría su milagroso ministerio sacerdotal. Luego de una desesperada búsqueda, los dos amantes se volvieron a encontrar en San Francisco, California, y acordaron casarse. Disfrutaron de una maravillosa luna de miel en Hawái, y volvieron para establecerse como una pareja laica en el área de la "Ciudad por la Bahía" encarando al gran Océano Pacífico. Gabriel y Theresa Infante, esperando su primer bebita, encuentran apoyo de unos nuevos amigos de edad mayor en un pueblito cerca de San Francisco y empiezan su vida de casados con la bendición de Dios. Satanás y sus fuerzas del mal no están satisfechos con la nueva situación, a pesar de que su deseo de que el Tejedor de milagros se saliera del sacerdocio se había cumplido. Gabriel continúa su servicio al Rey de reyes ahora como laico, ayudando a sus semejantes como instrumento del Todopoderoso quien continua realizando maravillas a través del humilde tejano. Las circunstancias del místico han cambiado ahora que tiene su propia familia a la cual sostener y proteger, pero la batalla es la misma de antes en contra de las hordas infernales y sus seguidores humanos. El San Antoniano encuentra empleo como constructor en un negocio de reparaciones de casas donde aprende nuevas habilidades. La feliz pareja con su hijita va de visita con los padres de Gabriel en México, donde sufren un suplicio en manos de unos desalmados pandilleros secuestradores, violadores y ladrones. La suerte de la familia da vueltas por todo el tiempo que viven en California y las circunstancias los obligan a alejarse de ahí.